La coronación de los Reyes de Reino Unido es una tradición que lleva más de 1.000 años y, por ende, está cargado de ritos, símbolos y pompas. En esta ocasión, como en los años anteriores, el Príncipe de Gales, Carlos III, asumirá el trono el 6 de mayo en la Abadía de Westminster en Londres. Sin embargo, al ser el primer acto que se celebra en más de 75 años se espera que sea un poco particular.
- En primer lugar, la coronación no será tan larga como la de la Reina Isabel II (su madre). En este caso se preveé que dure tan solo 90 minutos.
- Se espera que asistan unas 2.000 personas, cifra pequeña en comparación a los 8.000 individuos que asistieron en 1952.
- Carlos III y la reina consorte, Camila, se trasladarán desde el Palacio de Buckingham a la Abadía de Westminster en la procesión de la coronación.
- La carroza que trasladará al rey Carlos III y la reina consorte será tirada por seis caballos y aunque tenga una apariencia antigua y sofisticada, contará con comodidades modernas como la calefacción, aire acondicionado y ventanillas eléctricas.
- Durante todo el trayecto y la ceremonia de coronación, tanto el rey como la reina consorte, estarán acompañados del heredero, el príncipe William y su esposa Kate junto a sus hijos.
- Será escoltado por varios regimientos de la guardia real vestidos con uniformes de gala.
- Cuando lleguen a la puerta oeste de la abadía, los reyes se dirigirán en procesión solemne hacia sus tronos, frente al altar mayor.
- Se le otorgará la corona de San Eduardo hecha en 1661 que tiene una estructura de oro macizo y estará engastada de rubíes, amatistas, zafiros, granate, topacios y gemas de turmalina. Su peso es de más de 2 kg.
- Tendrá los siguientes objetos una vez que sea coronado: las espuelas de oro, el anillo de soberano, la espada de la ofrenda, la espada del Estado, la espada de la Justicia Temporal, la espada de la Justicia Espiritual, la espada de la Misericordia o Curtana.
- El arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia de Inglaterra, Justin Welby, y otros tres dignatarios preguntan a los asistentes si reconocen a Carlos como su monarca. En ese momento todos deberán responder la célebre frase: “Dios salve al rey Carlos”.
- Luego de eso el rey debe jurar respetar las leyes de Reino Unido y los dominios y territorios de los que es soberano, así como mantener el estatus de la Iglesia de Inglaterra como religión del Estado.
- Al rey se le quita el manto ceremonial y se sienta en la Silla de la Coronación, un trono de madera fabricado en el año 1300 por orden del rey Eduardo I. Desde allí se consagra como jefe de la iglesia de Inglaterra.
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