La vista es uno de los sentidos más sensibles y que con mayor frecuencia sufre desgastes, incluso a temprana edad, por eso cuidarlo desde jóvenes es fundamental para prevenir problemas futuros. En función de ello, a continuación te presentaremos 6 hábitos que deberías evitar si quieres conservar la salud de tus ojos por más tiempo.
- Dormir con maquillaje: Al dormir con maquillaje no dejas respirar correctamente los poros de la piel que se encuentra alrededor de los ojos, por lo que terminas afectando su posibilidad de repararse. Adicionalmente, si parte de los cosméticos entran al globo ocular pueden causar irritación, enrojecimiento y hasta lagrimeo.
- Fumar: El consumo del tabaco en cualquiera de sus presentaciones afecta no solo los pulmones, sino también la visión. Parte de las partículas de humo que se expulsan al exhalar se depositan en el cristalino y pueden tornarlo opaco. Cuando esto ocurre recurrentemente es capaz de derivar al sufrimiento de cataras en la vejez.
- Ver televisión a oscuras: Este hábito puede afectar el sentido de la vista por la intensidad de la luz y la necesidad de que el ojo se adapte a los diferentes cambios.
- Dormir con lentes de contacto: Esto puede causar fisuras o heridas en el globo ocular, lo que al final casi siempre se transforma en infecciones en la cornea.
- Uso constante de pantallas digitales: Cuando te quedas más de dos horas viendo una pantalla digital, puedes desarrollar el síndrome el ojo seco y aparte favoreces el surgimiento del cansancio visual.
- Abusar del uso de gotas: Las gotas artificiales contienen diferentes químicos que muchas veces pueden ayudarnos y otras perjudicarnos. Por ejemplo, aquellas que traen corticoides si se usan con mucha frecuencia pueden disparar la presión visual. Lo mejor es evitar automedicarse.
Sumado a estas recomendaciones, se aconseja acudir al oftalmólogo con regularidad para prevenir o detectar de manera temprana cualquier patología, ya que muchas de las enfermedades oculares no reflejan síntomas al inicio. También es importante que cuides tu alimentación y mantengas una dieta basada en vitaminas A, C y minerales que contribuyan al correcto funcionamiento de las células de la vista.
