Los Celtics de Boston pegaron primero en las finales de la NBA al vencer 107-89 a los Mavericks de Dallas en la noche que volvió Kristaps Porzingis. Jaylen Brown llevó las riendas de su conjunto para contener a Luka Doncic, el único que dejó números altos en los visitantes y estuvo durante todo el encuentro buscando acercarlos.
Por los célticos Brown dejó 22 ptos, 2 asistencias, 3 robos y 3 bloqueos y 6 rebotes para comandar la ofensiva, mientras que al momento de defender fue Jason Tatum el mejor con 11 rebotes, además de 16 ptos y 5 asistencias y 1 bloqueo. 9 de esos rebotes fueron en su propio tablero, condicionando los intentos de Dallas.
Después de más de un mes de inactividad por lesión, Porzingis regresó al tabloncillo para aportar a su equipo, en una gran noche que terminó con 20 ptos y 6 rebotes en 21 minutos, sin asistencias pero sí con 3 bloqueos, además de haber tomado el 100% de sus rebotes en registros defensivos durante el encuentro.
La actuación del cuadro de Boston fue inmaculada con los dos primeros cuartos ganados, dejando diferencia de 17 en el primero y limitando al máximo las anotaciones de los Mavericks, que dejaron su número colectivo más alto en 24 en el tercer cuarto, que además ganaron por apenas uno de diferencia.
Luka Doncic fue el auténtico líder de su equipo con 30 ptos, 1 asistencia y 10 rebotes, aunque estuvo bastante solo en las anotaciones y aporte tomando en cuenta que el más cercano de sus compañeros fue P.J. Washington, con 14 ptos, 1 asistencia y 8 rebotes. De Kyrie Irving se esperaba mucho más dado su perfil y competencia personal con Boston, pero apenas anotó 12 puntos con 3 rebotes y 2 asistencias.
