Atlético de Madrid y Borussia Dortmund se citaron en el Estadio Metropolitano de la capital española para enfrentarse en los cuartos de final de la Champions League, en el duelo relativamente menos atractivo en estas instancias del torneo pese al buen trayecto de ambas escuadras hasta ahora.
Desde el minuto 1 la acción estuvo asegurada con Griezmann en plan asistente y líder del equipo, mandando un balón preciso a Morata pero el delantero español se tardó en decidir, dejando que un defensa le alcanzara. Solo 4 minutos después el propio Dortmund se complicó en salida y De Paul aprovechó para cazar un balón suelto y marcar el 1-0.
Al 33 se amplió el marcador gracias a Griezmann, de gran partido. El francés recibió un balón al borde del área y aprovechó la soledad de Lino para dejarlo frente al arco con un pase y así poner el 2-0 en el marcador. Un Atlético raramente ofensivo dominaba el encuentro y no fue hasta el 42 que Oblak tuvo que estirarse ante un disparo de lejos.
El segundo tiempo comenzó con dominio colchonero y una ocasión clara de Molina, pero Kobel cerró bien el espacio y dejó sin opciones al argentino, algo que se repitió al 77 pero ahora en los pies de Lino, que volvió a ver al portero del Dortmund como una pared insuperable en espacios reducidos.
El Dortmund carburó lento en el segundo tiempo a fuerza de velocidad y aguante, enfrentando a un rocoso equipo español que sigue sabiendo manejar partidos difíciles en Champions. Haller apareció para el descuento al minuto 80, en un control complicado con un giro poco estético, pero suficiente para batir a Oblak, que al 86 vio como un disparo de fuera del área se estrelló en su poste superior.
2-1 el marcador final para los de Simeone que ahora tendrán que ir a Alemania a aguantar el aluvión amarillo y negro del Signal Iduna Park el 16 de abril, además del esfuerzo máximo del Dortmund, descolgado de la Bundesliga y con esta bala como último gran frente de la temporada.