Endrick Felipe es noticia en el mundo y no es para menos. El delantero brasileño de apenas 17 años de edad retomó el buen ritmo en el Palmeiras y lo ha trasladado a la selección de mayores, que lo convocó a los partidos amistosos ante Inglaterra y España, en Wembley y el Santiago Bernabéu respectivamente.
Desde comienzos de semana su nombre apareció en todos lados por una sensible carta que le escribió a su hermano menor en The Players Tribune, portal digital para que los atletas profesionales ofrezcan otra visión de su vida, de su carrera y de los detalles de su día a día. Esto último, lo plasmó perfecto en sus líneas.
Primero se citó con Wembley y allí apareció donde deben aparecer los matadores, los delanteros de olfato, para empujar un balón tras una jugada individual de Vinicius que el portero inglés detuvo. Victoria para Brasil, ante un rival de peso, en un templo del fútbol y demostración de Endrick de estar tocado por algo especial.
Ese olfato goleador que mostró es el que necesita el Real Madrid, dueño del siguiente templo que visitaría Endrick, el Santiago Bernabéu. Esperando en la banca, el joven jugador entró al campo para formar u tridente con sus próximos compañeros, Vinicius y Rodrygo, en su próxima casa, Madrid.
De volea, sin perder un instante, Endrick cazó un balón para el momentáneo empate a 2 goles en la capital española. De nuevo, apareciendo en grandes momentos, en grandes lugares y con mucho carácter, raza, personalidad. “El Real Madrid, mi tercer sueño, el que no me atreví a escribir”, redactaba en la carta a su hermano para describir su próximo destino, el que ya le vio marcando goles.
A partir de verano Endrick se incorpora al equipo merengue con la mayoría de edad cumplida y una casa a la cual llegar, en la que su hermano correrá a placer, elegirá la vida que quiera entre el fútbol o cualquier otra cosa. Mientras, Endrick Felipe Moreira de Sousa marcará goles, se hará sentir en el Santiago Bernabéu o en cualquier otro campo en el que Ancelotti le de oportunidades. De momento, qué gran llegada a la élite, qué buen comienzo.
