La periodista Margarita Oropeza condujo una nueva mesa de análisis en "Abriendo puertas" para abordar la política y el panorama postelectoral de Venezuela junto a Jesús Torrealba (periodista y analista político), Giovanna De Michele (internacionalista) y Giulio Cellini (abogado).

Los expertos invitados se refirieron al diálogo realizado en la Asamblea Nacional entre el gobierno y algunos sectores de la oposición. Jesús Torrealba opinó que "en realidad todo esto que estamos escuchando sigue siendo parte del discurso político, sigue siendo –de alguna manera- los rezagos que quedan del pasado debate político aún inconcluso".

Sobre este punto, Giovanna De Michele explicó: "este llamado a diálogo está orientado a mostrar al mundo la cara de un estamento político venezolano dispuesto a sentarse con factores de oposición, tal como los define el propio gobierno, para llegar a acuerdos (…). Esto lo que hace es transmitir un mensaje a la opinión pública nacional y a la opinión pública internacional de la disposición del ejecutivo venezolano de sentarse con los factores de oposición a dialogar sobre la Venezuela del futuro".

Por su parte, Giulio Cellini indicó: "lo primero es revisar el encuadre de ese diálogo, porque quienes están participando de ese diálogo hay que ver cuántos votos sacaron en las elecciones del pasado 28 de julio (...). Creo que si querían que participara la Plataforma Unitaria tenían que producirse conversaciones previas para que se produzca el gran diálogo político que requiere el país".

En relación a la propuesta de reformar las leyes electorales, el abogado precisó: "está bien claro en la Constitución cuáles son los requisitos de elegibilidad para determinados cargos públicos (…). De tal manera que intentar por vía legal imponer algunos otros requisitos pudiera estar al margen de la Constitución". Recomendó que "cualquier revisión legal que se pretenda hacer, responda a un gran consenso nacional, no a un grupúsculo donde está el gobierno y algunos otros que participaron en las elecciones y que fueron liquidados en ese proceso electoral desde el punto de vista político".

Torrealba secundó esta afirmación alegando que "esto fue un diálogo sin los interlocutores necesarios para que haya efectivamente un intercambio de opiniones fructífero (...). Eso no quiere decir que el diálogo verdadero no sea necesario, al contrario. Eso lo que subraya es la necesidad de un diálogo auténtico que sea útil".

Sobre si es posible el escenario de la negociación para una transición, Cellini consideró: "es muy difícil saber si es posible o no (…). En Venezuela toda posibilidad pasa necesariamente por caminos de negociación, de diálogo, de creación de confianza. Obviamente en este momento pareciera que ese escenario está como erosionado".

Mientras que De Michele subrayó: "para que exista una negociación tiene que haber, en todas las partes que están en torno a la negociación, la voluntad de ceder (...). No hay ninguna voluntad de ceder en ninguno de los dos bandos (...), eso aniquila cualquier posibilidad de negociación (…). En este momento en Venezuela esa posibilidad no existe porque, por un lado, el gobierno se ratifica como el gobierno legítimamente electo y, por el otro lado, la oposición –que tuvo mayor cantidad de votos- se ratifica como el gobierno legítimamente electo".

En relación a los pronunciamientos de la comunidad internacional, y en concreto de la Organización de los Estados Americanos (OEA), la experta De Michele aseguró que eso "es muy significativo desde el punto de vista político (...), pero no es absolutamente vinculante (...). No hay ninguna acción desde el punto de vista legal que obligue a la Organización de Estados Americanos, que la faculte, para tomar ningún tipo de acción directa, concreta, sobre el territorio venezolano".

Sobre la presencia de Edmundo González Urrutia en territorio español, Torrealba explicó: "puede contribuir de manera enorme a evitar la fragmentación del exilio venezolano y a colocar lo que ocurre en el exterior en la diáspora venezolana en sintonía con las estrategias que aquí se están desarrollando".

Ante esta posibilidad, De Michele analizó: "ese accionar que está teniendo el embajador Edmundo González Urrutia (...) está generando un nivel expectativas excesivamente alto en un sector de la población venezolana dentro de Venezuela y en el exilio, y allí va a venir otra vez esa desesperanza aprendida que hemos tenido todos los venezolanos cuando veamos que ese nivel de expectativas no se va a poder cumplir".

Cellini abordó desde la perspectiva legal la postura de representantes del Estado sobre apegarse a la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ): "el gobierno no ha logrado convencer ni a la sociedad venezolana ni a la comunidad internacional de su victoria electoral (…). En la gaceta (electoral) lo que tenemos es la suma numérica, la proclamación, pero no está en los resultados mesa por mesa que es como corresponde", remarcó.

Durante el programa también analizaron el pronunciamiento de la Asamblea General de las Naciones Unidas. De Michele, en calidad de experta, advirtió: "es el órgano más democrático, pero es el más inservible. Las resoluciones de la Asamblea General no tienen carácter vinculante, es decir, no generan ningún tipo de obligación jurídica para los Estados (...). Las decisiones realmente importantes en el sistema de Naciones Unidas se toman en el Consejo de Seguridad y allí no se va a tomar ninguna decisión determinante con relación a Venezuela, entre otras cosas, porque en el Consejo de Seguridad hay cinco miembros permanentes y entre esos está China y está Rusia, que son los principales aliados comerciales de Venezuela en estos momentos".

Cellini, sobre esta materia, añadió: "ciertamente, no es la primera vez que vemos en la Asamblea General de Naciones Unidas (...) pronunciamientos a favor de la reinstitucionalización del país, de la redemocratización de Venezuela y es muy interesante (...). El problema es que la solución electoral que estaba planteada y que tenía su mejor lugar el 28 de julio pasado no se produjo".

Sobre el escenario postelectoral, Torrealba indicó: "estamos de acuerdo en la necesidad de que haya una solución negociada, pacífica, electoral, democrática y hay que construir la condición para que eso ocurra (...). Yo sí creo que esto está cambiando, y está cambiando para bien".

En relación a la discusión sobre las sanciones contra el país, el político agregó: "aquella idea de que ahoguemos a Venezuela resulta ser absolutamente torpe"; por su parte, De Michele sentenció: "la victimización en política es muy rentable. Cuando tú tienes la oportunidad de echarle la culpa al otro de tu incapacidad para gobernar, sales ganando".