El amor como todo en la vida puede llegar a acabarse, así lo demuestran el actor Sylvester Stallone de 76 años y la modelo Jennifer Flavin de 54 años, quienes han decidido separarse luego de 25 años de relación. La noticia sorprendió a sus fanáticos, pues en mayo de este mismo año ambos se mostraron felices a través de las redes sociales celebrando su aniversario. No obstante, no todo es como parece y aunque a nivel digital siempre se mostraban alegres, en el interior de su relación luchaban con diferencias irreconciliables.
Cabe destacar que la pareja llevaba junta desde 1988 y se casaron en 1997, fruto de su amor nacieron 3 hijas: Sophia, Sistine y Scarlet. Las tres jóvenes comparten el mismo apellido y su segundo nombre que es Rose. Si bien durante 25 años fueron una familia estable y formidable, en la actualidad las cabecillas del hogar han decidido optar por el divorcio para darle un ruptura oficial a su relación.
La primera en hablar al respecto fue la propia Flavin que comentó: “Siento gran tristeza de anunciar que después de 25 años de matrimonio he pedido el divorcio de mi esposo, Sylvester Stallone. Aunque no seguiremos casados, siempre atesoraré los más de 30 años que relación que hemos compartido, y sé que los dos estamos comprometidos con nuestras hermosas hijas. Pido privacidad para nuestra familia mientras avanzamos de forma amistosa”.
Frente a ello el propio Stallone declaró al medio internacional TMZ que aunque estaban yendo por caminos separados siempre habrá respeto entre ellos, admiración y cariño. Además, para cesar los rumores al respecto, el actor aprovechó el momento para desmentir que su perro fue la razón del divorcio. Aunque hace 14 años el protagonista de Rocky se tatuó en el hombro derecho el rostro de Flavin y ahora en esa zona aparece el rostro de Butkus, la mascota.
De acuerdo a lo declarado por el actor, al parecer intentó repasar el tatuaje en el aparecía su exmujer y terminó arruinándolo por completo, por lo que decidió cubrirlo con la carita de su perro. Fue por ello que surgieron los rumores de que a causa del divorcio fue el deseo del actor de tener un rottweiler frente a la negativa de Jennifer Flavin.