El Paddock está que arde en la Fórmula 1 tras el segundo intento de filtrar información que sucede en la temporada, esta vez desde Mercedes y con Lewis Hamilton como afectado directo. En un mensaje de emisor incógnito se indica que la escudería está “saboteando” el trabajo del inglés e incluso podrían estar “jugando con su vida”.
Ante las graves acusaciones, Toto Wolff, máximo representante de Mercedes, aprovechó la rueda de prensa de jefes de equipo que se hizo durante el GP España para aclarar el tema, indicando que incluso la policía está al tanto y forma parte del procedimiento para evitar futuros inconvenientes o males mayores.
"Tenemos a la Policía ahí, estamos rastreando la IP y el teléfono porque el chantaje online tiene que parar. La gente no puede esconderse tras sus teléfonos u ordenadores y tratar así a los pilotos. No sé qué tipo de lunáticos y conspiranóicos hay por ahí", enfatizó Wolff en función al asunto, que estalló en Mercedes.
"Cuando recibimos este tipo de correos electrónicos, y recibimos toneladas de ellos, es perturbador. Especialmente cuando hay alguien hablando de la muerte y todas esas cosas. Así que en este caso en particular, he dado instrucciones de usar toda la fuerza, que la policía lo investigue", siguió.
"Tenemos amistad con Lewis y queremos terminar por todo lo alto, celebrando, los dos coches tienen que ganar. Si la gente quiere esconderse detrás de un Instagram, les animo a que vengan, digan quiénes son y hablaremos, pero que no se escondan. Lo vamos a perseguir porque hay límites", cerró Wolff, aclarando la relación que hay entre el piloto la escudería.
Las declaraciones están en todos los medios relacionado al mundo del motor, muchos de ellos con el correo que generó la discordia ya que en la lista de destinatarios incluyeron a las principales casa de difusión, así como los altos cargos de la F1 y la FIA directores de equipo y varios medios de comunicación.